21 septiembre - Lluvia

Está lloviendo. Siempre se agradece una suave lluvia. Incluso una tormenta. Me gusta la lluvia. No entiendo por qué la gente se deprime con ella. Acaso el miedo escénico de un decorado gris. Acaso el yugo del agua sobre la cabeza. No lo sé. Me gusta cómo huele la lluvia. Me gusta verla. Tras la ventana o empapándome en ella. Me da igual. Siempre es de agradecer y más en estos momentos. La lluvia tiene ese terrible don desmemorizador que hace que a la gente se le olvide conducir. Tiene la capacidad de hacer correr a ancianas amas de casa y obesos parados. Posee la innata capacidad de hacer reir cuando se llega a un destino empapado. Hace que la ciudad adquiera una luz más romántica. Encima siempre hace falta.
Y la gente sigue diciendo que no le gusta la lluvia.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Como se nota que eres de Sevilla, si vivieses en la "Ciudad de la lluvia" y lloviese 300 días al año te gustaria el olor del secano.

Ja,ja,ja, pero si, siempre se agradece una lluviecita (¿existe este termino?) tras el infierno del verano.

Saludos.

Anónimo dijo...

¿Y los clientes que preguntan si mañana lloverá? Si eso no lo sabe ni la tia del tiempo de la tele.

Archer dijo...

Cuerpo!, luego vienes a decirme que yo no actualizo...
*tos, tos*